Terapia Transpersonal

La consulta transpersonal consiste en adentrarse en un espacio interior, en el que habitan relatos de experiencias de sombra y dolor. En tal proceso, es habitual resistirnos al cambio y, es esta resistencia,  la causa por la que sufrimos al tratar, inútilmente, de detener el imparable proceso de apertura de nuestra mente y de nuestro corazón al flujo del amor–consciencia.

Las crisis son una oportunidad para acercarnos a lo que somos en esencia, el hecho de desplegar una visión integral sobre las crisis aporta claridad y el descubrimiento del sentido.

El proceso de desarrollo del ser humano ha sido, en muchas ocasiones, comparado con la oruga que deviene mariposa. La oruga que se autoincuba en la quietud de la crisálida antes de renacer como mariposa, nos habla de la biografía de nuestros propias crisis de crecimiento que nos impulsan a nacer a una identidad de mayor esencialidad. Cuando la crisálida se abre, comprendemos que el anterior conflicto y “descenso a los infiernos” sirvió de entrada a un camino de mayor renovación y consciencia.
• El dolor forma parte del juego transformador del crecimiento.
• El conflicto y “descenso a los infiernos” suponen una puerta de entrada a la renovación y a la autoconciencia.

La mente es como el agua. Cuando está turbulenta, es difícil de ver.  Cuándo está calma, todo se aclara.